El Equipo de investigación Ciudad Patrimonio Mundial (CPM) de la Universidad de Cuenca realizó, el 23 y 24 de noviembre, la cuarta edición del evento “El futuro del pasado”, un espacio de reflexión sobre la toma de decisiones compartidas entre diversos actores involucrados en la conservación y transmisión intergeneracional de la riqueza patrimonial de territorios urbanos y rurales del Ecuador.

El enriquecimiento de conocimientos por medio del intercambio de experiencias, el desarrollo de charlas magistrales con expertos nacionales e internacionales, exposiciones y  talleres, fueron las actividades contempladas en la agenda.

El director de CPM, Fausto Cardoso, inició la jornada rememorando la vida, acciones y sabiduría de los esposos Segundo y Celia Déleg, de la comunidad Raricucho de la parroquia Susudel. Los presentó a los asistentes mediante una fotografía que proyectó en el auditorio de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo.

De ellos fue narrando las habilidades que poseían en el sembrío y cultivo de tierras, el papel que desempeñaban en las procesiones de Semana Santa, hasta el rito de la escaramuza en honor a San José. La responsabilidad en el cuidado de la capilla, la forma en la que organizaban su trabajo… “fueron dos personas sabias, sus historias mostraban con tímida elocuencia el mundo de la hacienda de Susudel de la cual fueron los últimos huasicamas”.

Fue una forma de enaltecer a esta pareja que, en septiembre pasado, dejó el mundo terrenal. “Estos seres rebosantes de experiencias y narrativas muchas veces se nos van para siempre con sus secretos y es que, esta sociedad contemporánea ha acentuado la distancia entre las generaciones”.

Con esta breve y sentida historia, Cardoso enfatizó en la importancia de conservar la riqueza de los legados culturales recibidos para poner en práctica sus enseñanzas, adaptándolos a las necesidades contemporáneas, sin necesidad de estigmatizar los tiempos actuales. Así, “El futuro del pasado” se convierte en una oportunidad de intercambios, experiencias y reconocimientos.

Y en este compartir, se dio a conocer el trabajo del proyecto TEAM-Minga, referido a la construcción de directrices innovadoras de gobernanza del patrimonio cultural edificado, desarrollado en El Vado, Las Lagunas y Cochapata, escenarios urbano, rural y en transición, respectivamente.

Desde CPM se informó que los avances alcanzados serán enriquecidos con el intercambio de buenas prácticas desarrolladas en otros territorios nacionales e internacionales donde las comunidades tienen un rol fundamental de buen uso y buena gestión de su legado cultural.

Para Toa Ortega de Las Lagunas, Saraguro (Loja), la participación en el proyecto desde el 2019 ha significado la oportunidad para conocer y comprender qué es el patrimonio y lo que representa. De esas características destacó que “somos las vivencias, tradiciones, lo que compartimos. El patrimonio edificado se forma a partir de todas las costumbres, de nuestras actividades cotidianas”, manifestó.

Destacó que la intervención de la Universidad de Cuenca les ha motivado a proteger sus valores y rescatarlos con el objetivo de hacer que trasciendan a las nuevas generaciones. Como factor clave, Toa mencionó que de lo aprendido son conscientes que deben registrar en documentos la sabiduría de su comunidad para dejar constancia de lo que les caracteriza.

La rectora María Augusta Hermida resaltó que el patrimonio es parte de la sostenibilidad y que para ser tal debe ser local, partiendo de las necesidades propias de la gente; además, compartida y construida mediante el accionar de todos los actores y, ser fuerte, que no se convierta solo en un adjetivo, puntualizó.

En las intervenciones se contó con la del presidente de la Red PRECOMOS, Koen Van Balen y el alcalde de Cuenca, Pedro Palacios. Entre las ponencias magistrales: Pablo Longoria, representante World Monument Fund; con el tema patrimonio rural. Luis Herrera habló de los Sistemas de organización ancestral Ecuador. Ronald Martínez Villareal se refirió a la Red de Museos comunitarios en Costa Rica.

Para saber

CPM también desarrolló, el 19 de noviembre, un evento internacional para compartir el trabajo realizado con el proyecto ILUCIDARE financiado por la Unión Europea, en el marco del programa Horizon 2020. Contó con la participación de expertos locales, miembros de comunidades y académicos de diversas partes del mundo.

Este espacio promueve la innovación basada en el patrimonio y en las buenas relaciones de actores locales e internacionales alrededor del mismo.