Del 26 al 28 de octubre se desarrolló el XIII Simposio Nacional de Desarrollo Urbano y Planificación Territorial, liderado por la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Cuenca, en conjunto con el Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (MIDUVI), la Secretaría Nacional de Planificación, la Asociación de Municipalidades del Ecuador (AME), el Consorcio de Gobiernos Autónomos Provinciales del Ecuador (CONGOPE) y el Banco de Desarrollo del Ecuador.

En esta edición, el tema abordado fue “Desarrollo territorial, pandemia y recuperación”, en torno a cuatro ejes: pandemia y recuperación de los territorios, planificación del desarrollo territorial pospandemia, enfoques e instrumentos para la innovación de la planificación y marco institucional y legal. Se contó con la participación de expertos nacionales e internacionales y de estudiantes de arquitectura, economía, sociología, de ciencias sociales que están vinculadas en mayor o menor medida con el desarrollo, el ordenamiento del territorio y la planificación de la ciudad.

El coordinador académico del Simposio y docente de la Universidad de Cuenca, Fernando Pauta, resaltó del evento que: “Tenemos una enseñanza fuerte para que los instrumentos de planificación pongan énfasis en la prospectiva, en la creación de escenarios futuros que puedan prever, mejorar la capacidad de gestión frente a situaciones que causó la covid-19”.

Pauta agregó que el balance de este espacio de reflexión se resume en que las planificaciones vigentes no están hechas para enfrentar situaciones de crisis, que a los gobiernos autónomos descentralizados les resultó complicado cumplir con los planes operativos anuales; de ahí que, entre las lecciones es preciso aprender cómo mejorar la gestión de los propios recursos públicos.

El coordinador académico resaltó que el aporte de la Universidad de Cuenca para enfrentar temas como los descritos consiste en demostrar que se cuenta con herramientas para enfrentar de mejor manera los propios procesos de planificación siendo más rigurosos con las metodologías y, sobre todo, crear escenarios futuros para diseñar planes más fuertes.

De su parte, la rectora María Augusta Hermida concordó que la recuperación pospandemia supone retos multidimensionales para la planificación, para lo cual se debe partir de una visión prospectiva de la ciudad y el territorio. Enfatizó en la necesidad de asumir la “responsabilidad de planificar la economía, construir la política pública, fortalecer el Estado como facilitador del desarrollo y fortalecer la relación entre sector público, privado y academia, para lograr reducir las desigualdades entre personas y los desequilibrios entre territorios”.